Qué es el protocolo PAS
En todas las carreteras suceden accidentes de tráfico de forma casi diaria, siendo los primeros minutos totalmente determinantes para las víctimas. Ser testigo de cualquier choque es muy estresante, pero debemos de poner en práctica varios puntos para prestar toda la ayuda posible, de una forma segura.
Se conoce como protocolo PAS la guía para poder ayudar a las víctimas, también a las de tráfico, siendo las siglas de Proteger, Avisar y Socorrer. Esta es una forma de reducir las muertes en carretera y socorrer de forma correcta. Las autoridades de tráfico de nuestro país aseguran que un 50% de las muertes de accidentes de tráfico suceden de forma inmediata o los primeros minutos, de ahí la importancia de llevar a cabo los primeros auxilios.
Pasos a seguir
Antes de nada, hay que recordar que ayudar es una obligación, pero que no en todos los accidentes, por su nivel de gravedad, se puede hacer correctamente. Además, nunca debes exponerte a otros conductores, teniendo que ubicarte en una zona segura tanto para la víctima como para ti. Pon en práctica todos estos pasos y ayuda a que las vías de nuestro país sean seguras y solidarias.
Proteger
Cuando se habla de proteger no es solo poner a salvo a la víctima, sino también a ti mismo para evitar que se produzca un accidente en cadena. Si no tienes experiencia en este tipo de maniobras, es preferible que dejes que otra persona comience el protocolo correctamente, aunque animamos a todos los conductores a conocer los pasos prácticos para ser útil en este momento.
Lo primero que debes hacer es observar la situación y colocar si fuera necesario todas señales que indiquen que en ese tramo ha pasado un accidente: hablamos de las luces de accidente o de la baliza de emergencia, antiguamente los triángulos que aún conservamos en nuestros coches.
Avisar
Una vez que hayamos protegido a la víctima del resto de coches, debemos de continuar contactando por los servicios de emergencia para que acudan al lugar del accidente: sanitarios, Policía, Tráfico… todo ello es posible si contactamos con el 112, un número desde el cual se gestiona toda la emergencia.
Una vez que llames, identifícate, informa de lo que ha sucedido e informa del número de personas que necesitan asistencia médica en ese momento. A continuación, deberás de detallar en qué carretera estás, el punto kilométrico y dónde se ha producido el choque o accidente.
Una vez que llames, identifícate, informa de lo que ha sucedido e informa del número de personas que necesitan asistencia médica en ese momento. A continuación, deberás de detallar en qué carretera estás, el punto kilométrico y dónde se ha producido el choque o accidente.
Socorrer
El último paso, y que no siempre es posible por la gravedad de la situación, es socorrer: siempre de manera rápida y eficaz. Haz una comprobación rápida de las señales vitales de la víctima: si respira, si habla y mantiene su nivel de consciencia y si hay hemorragias o lesiones graves, todo ellos sin mover a la víctima, ya que podríamos empeorar cualquier lesión grave.
Si la víctima no está consciente y no respira con normalidad, debes de tumbarlo sobre su espalda y comenzar a hacer la reanimación cardiopulmonar de primeros auxilios. Coloca tu mano sobre el centro del pecho de la víctima, seguida de la mano dominante y comienza a hacer el masaje fuerte y rápido, sin parar con 30 compresiones a un ritmo de 100 por minuto. Deja caer tu peso, sin que se doblen los brazos, aprovechando tu propio peso para hacer la maniobra.
El último caso que puede darse es que la víctima esté inconsciente, pero respire con normalidad. Comprueba de manera continua que está respirando y colca a la víctima en posición lateral de seguridad, procurando no mover el cuello en exceso. Si la víctima tiene una hemorragia, presiona la herida con ropa hecha un ovillo, manteniéndolo en todo momento. Si la herida la tiene en alguna de las articulaciones, puedes elevar esta zona por encima del nivel del corazón, presionando a la vez.
Auxiliar es una obligación
Si tienes que socorrer a una víctima, te recomendamos que siempre hables con ella y la mantengas en calma, sin darle de comer ni de beber. Auxiliar es una obligación moral para todos, pero además supone un delito su incumplimiento, castigado en el Código Penal como delito de omisión de socorro. El artículo 195 detalla que quien no socorra a una persona que esté desamparada, en peligro manifiesto y grave, será castigado con hasta 3 a doce meses con una multa.
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